Carga de oxigeno

• La inyección de 2.000 mg de oxígeno por litro de agua. Se trata de un nivel de oxigenación que no alcanza ningún otro producto en el mercado.
• La absoluta seguridad, higiene y salubridad del sifón. Tanto el recipiente como el cabezal soportan 10 veces la presión que se origina en su uso.
• A diferencia de otros productos que pueden perder parte de su contenido beneficioso tras su embotellación, el oxígeno inoculado en el agua conserva su concentración hasta el momento del consumo.
• Gracias a la exclusiva tecnología utilizada en su fabricación —disponible sólo en Hungría, USA y Taiwán—, el cuerpo del sifón se fabrica en acero medicinal 18/10, anticorrosivo, inoxidable y muy ligero. El oxígeno se encuentra protegido de escapes o cualquier contaminación ambiental.

El éxito del sifón es tal, que en los últimos tiempos se ha extendido por Europa: Inglaterra, Austria, Alemania, Francia, Rumania, Eslovaquia... Ya lo comercializan.